viernes, 5 de octubre de 2012

PASEANDO POR EL PARQUE DEL RETIRO AYER 2.- Plantas y algun monumento


Si, ayer fue un día precioso; la mañana ayudaba a salir a la calle; la luz, esa luz otoñal de Madrid, invitaba a mirar y a deleitarse con el entorno. Hasta parecía que el León de las cortes sonreía complacido con el día que arrancaba.





 Ayer la Carrera de San Jerónimo estaba tranquila, y grupos de colegiales andaban por sus aceras contemplando algo que quizás no capten sus ojos jóvenes pero que la educación y el tiempo les mostraran: la geometría urbana. Geometría que alberga desde lo mas misero a lo mas grande, desde la suciedad al arte mas sublime de un museo.






Un poco mas abajo, como queriendo corroborar el día que hacia, Neptuno se daba una ducha sin soltar su tridente delante de todos nosotros. ¿Quien me presta una toalla? Esa frase parecía querer salir de su boca para secarse aquellas gotas que cayéndole en los ojos no le dejaban ver Madrid. 







El Casón del Buen Retiro. A cualquiera que le preguntes te dirá que es un museo. En parte tiene razón. Lo que muy pocos saben, es que este palacete era parte del complejo del Palacio del Buen Retiro y fue realizado con un único fin: salón de baile.
En su cúpula, existe una extraordinaria pintura de Luca Giordano, que representa una alegoría del Toisón de Oro.
Durante unos años en él estuvo asentado el Guernica de Picasso.
Enfrente del Casón y ya en el interior del Parque del Retiro el Parterre.





No se si lo que veo es un árbol, una representación de nuestros sesos o la cabeza monstruosa de una libélula que quiere comerme. Los jardineros del parque, van cortando estos cipreses de tal forma que están empezando a adquirir formas chocantes. Claro que si realmente la figura es la cabeza de un insecto aquel dicho "Tienes menos cerebro que un mosquito" puede llegar a diluirse totalmente.









Hemos subido a la parte alta. Los peldaños se han quedado atrás, ocupados por un colegio de críos de unos ocho años a los que dos maestras les estaban dando una clase practica y preciosa sobre botánica.
Eso es enseñanza. ver una hoja de un castaño de Indias y saber cual es la parte que recoge la luz, como son sus células, que tipo de hoja. Cuando eramos críos nuestra enseñanza se reducía a un pupitre de madera, con un tintero de porcelana y un palote con su plumilla. Y tenias suerte si el maestro se salia del libro y empezaba a comentar y discutir sobre algo contigo. Una cosa que me encanto es que ningún niño llevaba ni teléfono móvil, ni aparato electrónico alguno. Solo papel, lápiz y su correspondiente goma de borrar.







Resplandecen al sol las hojas de los castaños. Su verde se transforma en una luz amarillenta que indica algo. Indica que el invierno empieza a aproximarse. 
Que las mangas cortas se pondrán en cuarentena dentro de unos días para dar paso al disfraz del abrigo. pero indica también que el sueño largo y prolongado que tiene que sufrir el árbol esta ya cercano.
Lo he pensado muchas veces: ¿Que sentirá un árbol durante su sueño invernal? El árbol no muere con la caída de las hojas, solo se aletarga, se endurece para poder soportar los fríos, pero sigue allí aferrado a la tierra, luchando contra todo para seguir de pie.










Unos se dan mas prisa que otros. Los castaños de Indias no pasan por esos colores brillantes y llamativos de otros arboles. No, ellos van derechos al grano, como si quisieran pasar del verano al otoño sin dejar un rastro de belleza. Sus hojas se vuelven de color chocolate, un chocolate extraño,y pronto llenaran el suelo de los paseos que antes pisaban los reyes de España.
Una manta de hojas cubrirá los caminos y las sendas que de forma casi paralepípeda recorren todo el parque, truncados solo por las grandes avenidas.















Que delicia, aunque tu no lo veas, un padre con sus hijos jóvenes navega en el bote; sus reflejos quedan en el agua ya que sus imágenes quedan para ellos. No puedo romper la intimidad del momento con mi objetivo, pero si puedo recordarlo.
Solo de la barca he captado el remo hundido en el agua fangosa del estanque, en cambio del agua he sacado las luces de su ropa. El padre con camisa,se ha quitado la chaqueta y los niños con unos niquis, se reflejan en el lado derecho de la foto.
Una de las ultimas veces que vi yo a mi padre fue aquí. Veníamos algún domingo toda la familia a tomar una Coca cola y unas patatas fritas. Tendría alrededor de diez años.










Hay cipreses, creo que eso son, que dan estos pequeños y coloridos frutos. Por cierto venenosos. Parece mentira que un árbol tan grande sea capaz de generarse con una cosa tan pequeña que en su interior lleva la semilla que le dio vida.







 Cuando paseas por el retiro en estas fechas tienes que tener cuidado de los golpes de viento y de las ardillas; ambos son los causantes de la caida de castañas desde lo alto de los arboles. Como proyectiles lanzados desde un avion caen sobre tu cabez sin aviso de ningun tipo, muchas veces con cascara incluida.






En contraste con los castaños de Indias, esta acacia se presenta verde y limpia con las bayas que contienen sus semillas dispuestas a empezar a caer.
Contraste de luces, de verdes y azules. Y las semillas negras.







Lo bonito de estas mañanas otoñales en el parque es la cantidad de contrastes que existen de colores y de sombras. La luz y la oscuridad comparten el sitio acoplándose la una a la otra. Los colores hacen lo mismo. Miles de verdes distintos que embriagan, dejándose mecer por los rojizos de las hojas caídas y las tierras húmedas de las lluvias recientes. Y la luz de los arboles junto  al paseo lo enmarca...







El aire de bailarín que parece tener esta estatua del Paseo de los Reyes no le hace justicia a D. Alfonso I el Batallador, que derroto a los moros en muchos frentes; rey que llego a ser Emperador de los reinos españoles y que por culpa de las intrigas palaciegas divorcio de Dª Urraca de Castilla y León. Muriendo sin descendencia dejo sus reinos a las ordenes militares que rehusaron y su hermano Ramiro II "El Monje" le sucedió. ¿Recordais la campana de Huesca?...







En algún lugar siempre existe un faro, por muy sombrío que nos parezca, siempre hay una luz para guiarnos.
Este joven castaño emerge entre sombras queriendo ser el el faro. 







 La fuente de las Tortugas no dice que estamos terminando el recorrido por el parque. A nuestras espaldas queda el estanque y practicamente todo el paseo. Ha sido un paseo de charla y amenidad. Cuando no hay prisa y se puede comentar sin prisa, sin tener que medir los tiempos, los paseos suelen ser agradables.







Rompen las aguas contra las conchas de la fuente y los pajarillos se aprovechan de la belleza creada por las manos del hombre para convertir sus fuentes en sus cuartos de aseo. Miles de gotas mojan la piedra y crean en sus poros un moho negruzco que le da otra dimensión.








El Parque del Buen Retiro nos despide con un nenúfar de un pequeño estanque que mira a la Puerta de Alcalá. El adiós del parque a un par de caminantes que han recorrido sus paseos y han disfrutado de sus rincones. Volveremos otro día y el parque seguirá acongiéndonos.








La Puerta de Alcalá nos indica que volvemos al ruidoso tragín de la ciudad. Por un instante el asfalto ha quedado sin coches y da la sensación que en cualquier momento puede aparecer un carruaje.
¿Sabias que la Puerta de Alcalá no es igual por una cara que por la otra? Pues aquí donde lo veis me entere ayer de ello. Mi amigo Luis me lo dijo y es cierto. Fijaros en las estatuas de la coronación; son distintas de una fachada a la otra y hay mas detalles que otro día os contaré.








Con la diosa frigia me despido por hoy. La Cibeles, tirada por Hipomenes y Atalanta, los dos leones legendarios que debian disputar una carrera, es la diosa de la Tierra.
Hoy, como la gente desconoce de donde proviene su nombre la denominan en plural, como si más de una diosa hubiese en la fuente.
Nada más. Espero haberos entretenido un rato.
Hasta pronto
Antonio

No hay comentarios:

Publicar un comentario